


el flequillo sin embargo... no tiene forma alguna ya... qué hago? sólo puedo contemplar las tijeras con cierta desconfianza. se abren de piernas como una mujer y el reflejo de la luz en sus aspas me ciega. las abro y las cierro como si fueran interrogaciones.

4 comentarios:
dejeselo como el Capitán Cavernícola.
lo he pensao... no creas que no lo he pensao, txe!
Tú qué crees... ¿debería cortarme el pelo, o la escobilla que llevo encima de la cabeza como dice mi madre, dejarme unas rastas o raparme al cero por ciento TAE...?
Un besito, maja.
Todo un dilema existencial.
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